Marc Blanes Saumel
Nº 11 de Unidas Podemos Arganda:
Marc Blanes Saumel
(Izquierda Unida Arganda)
Aunque de familia catalana nací en 1992 en Madrid. Vecino de toda la vida del argandeño barrio de La Poveda. En pleno auge de la crisis, de la implentación del Plan Bolonia, del avance de los gobiernos de izquierda en América Latina, de la huelga general frente a la primera reforma laboral (del PSOE)… surgió en mí la necesidad de comprometerme y actuar frente a las desigualdades sociales existentes en nuestro mundo. Recuerdo que la biografía del «Che Guevara» fue especialmente reveladora para mí, al aportarme un ejemplo tanto de una perspectiva política transformadora como de una forma de ser y actuar coherente con ella. En este punto, comencé a implicarme en las Juventudes Comunistas, para después pasar a afiliarme a Izquierda Unida (2013) y más tarde al propio PCE. Y, desde el comienzo, siempre he estado volcado con una u otra reivindicación desde los colectivos o movimientos que surgían a mi alrededor, con especial importancia del 15M, las Marchas de la Dignidad, la Red de Solidaridad Popular y más recientemente la Asociación Vecinal de la Poveda.
A pesar de haberme encaminado a estudiar una Ingeniería, tras un primer año de prueba acabé matriculándome en Filosofía en la Universidad Complutense. Decisión a la que me vi impulsado por la necesidad de conocer a fondo las distintas propuestas teóricas que se habían hecho y se hacían para entender la sociedad que me rodeaba y para transformarla. Eso asentó un pensamiento y espíritu crítico siempre presente en mí, dado el paso de mi adolescencia por la mayor escuela de valores que puede existir en nuestras sociedades actuales: un grupo scout. Terminé la carrera en 2015 y a las dos semanas ya había logrado ser seleccionado para trabajar en una gran empresa multinacional, Amazon había llegado a España pocos años antes y su único almacén hasta el momento estaba en plena expansión. A finales de 2016 logré ser contratado como indefinido tras 14 meses de ETT, y menos de un año después en 2017 fui elegido miembro del Comité de Empresa. En 2018 y 2019 Amazon organizamos hasta 12 días de huelga tras la imposición del Convenio de Logística y contra la degradación de condiciones que conllevó.
Hoy más que nunca suena del pasado declararse marxista o comunista. Muchas críticas en ese sentido se despreocupan del hecho de que hay planteamientos que, por muy antiguos que sean, están absolutamente normalizados en nuestra día a día cotidiano, ya sea por su verdad o utilidad. ¿De dónde nos creemos que vienen, ya no sólo muchas de las fórmulas que utilizamos en Física o Química, sino decenas de fundamentos de nuestra actual vida social y política como el sistema de derecho, la división de poderes, la democracia, el constitucionalismo…? Como muchos pensadores han reconocido a lo largo de la historia, «caminamos a hombros de gigantes»: las ideas de grandes pensadores del pasado nos permiten alumbrar nuevos descubrimientos, conocer las cosas desde una mayor claridad y rigor, y organizarnos mejor como sociedades humanas.
Si soy comunista es porque creo ciertamente que una reflexión que hacía el revolucionario italiano Antonio Gramsci es plenamente aplicable al día de hoy. Él llamó a una de sus revistas durante su periodo de dirigente comunista «L’ordine nuovo», que acabó siendo órgano de expresión del Partido Comunista Italiano. Lo llamó así porque estaba convencido de que la sociedad capitalista, a pesar de su apariencia, era la sociedad del desorden. ¿Por qué las empresas competían entre ellas llevando a crisis de sobreproducción en las que había demasiados bienes en circulación como para ser rentables? ¿por qué muchos trabajadores aguantaban extenuantes jornadas laborales mientras había centenares de miles de obreros desempleados? ¿por qué no se aprovechaban todas las posibilidades de las fuerzas productivas humanas organizadas para hacer llegar el bienestar social a todo el pueblo? Y, de la misma manera, hoy, ¿por qué se mantienen centenares de miles de viviendas vacías mientras las burbujas de la hipoteca y el alquiler no paran de crecer? ¿por qué la desnutrición no ha desaparecido si diariamente se tiran toneladas de comida-mercancía a la basura? ¿por qué la extensión de la robotización no hace más que ampliar el paro en vez de mejorar las condiciones de vida de los trabajadores? La falta de iniciativa y la pereza mental mantienen ese desorden, por eso hace falta el máximo de nuestra inteligencia e iniciativa para acabar con él y conducir a la sociedad a maximizar su potencialidad de creación de bienes y servicios para un mayor bienestar para tod@s.
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#26M💜❤💚